Volvía del trabajo. Caminando, como siempre. Y un pensamiento casi con entidad de descubrimiento llamó mi atención.
Noté que hay sensaciones y/o pensamientos (Sí, me di cuenta repito la palabra. No tengo ganas de pensar en un sinónimo) que anuncian sin vuelta atras el fin de la adolescencia y el ingreso a la vida adulta.
El pensamiento en particular al cual me refiero quizás al ojo del lector parezca inocente pero si profundizamos en sus implicancias, tendremos como resultado la despedida de la adolescencia y en consecuencia, un ingreso a la vida adulta.
(Estoy dando demasiadas vueltas)
En el momento en que uno/a siente la necesidad de poseer un paraguas.
En el momento en que gasta su tiempo en dirigirse a una marroquinería (o similar) o bien se para ante un vendedor ambulante a mirar paraguas porque "necesito uno" (?).
En el momento, en que analiza la posibilidad de comprarse un piloto "para el agua che".
Cuando alguno de estos pensamientos irrumpe en uno como si fuera una necesidad insoslayable, es porque dejaste de ser adolescente.
Creo poder afirmar que nadie escuchó a un nene decir:
- Mamá comprame un paraguas.
Salvo obviamente que lo que le llame la atención al nene sea el dibujito de Ben 10 (tengo un sobrino asi que me se lo último en dibujitos). Es el dibujito y los colores lo que llaman su atención. Lo que en realidad quiere, pero no es que siente necesidad de un paraguas.
El caso de los jóvenes es análogo, no les pasa por sus cabezas "che me tengo que comprar un paraguas" como máximo su madre, abuela, tía, etc. se los regaló "pa´que no se moje cuando va al colegio".
En fin, voy a seguir averiguando...
Paso a explicar mi humilde teoría, si se le puede decir teoría: